Desde las decoraciones festivas, pasando por los dulces navideños, hasta las reuniones alegres, la preparación de las fiestas puede traer mucha alegría y risas. Sin embargo, para muchos, esta época del año también puede despertar sentimientos de estrés, ansiedad y agobio, ¡incluso para las personas más tranquilas y serenas! La verdad es que, sea cual sea la dinámica de tu familia, las fiestas pueden lanzarnos muchas bolas curvas. Ya se trate de calendarios sobrecargados, tráfico navideño, fechas límite de fin de año en el trabajo, o suegros y seres queridos que se pasan de la raya, hay muchos factores estresantes que pueden anular la alegría de las fiestas. Pero, ¡este año no! Con un poco de orientación sobre cómo proteger tu salud mental, saldrás indemne de las fiestas.
A continuación, 10 consejos de autocuidado para afrontar las ajetreadas fiestas pensando en tu salud mental.
10 consejos para cuidar la salud mental en las fiestas navideñas
Haz una lista de alegrías navideñas
Independientemente de las fiestas que celebre en los meses de invierno, elija un puñado de actividades que favorezcan su salud mental y eleven su estado de ánimo. ¿Qué es lo que le hace sentirse de nuevo como un niño o le infunde una sensación de asombro? La temporada puede estar repleta de “cosas que hay que hacer” en lugar de “cosas que nos gustan hacer”, y eso puede provocar un poco de resentimiento (¡a la vez que resta alegría a la que se supone que es la época más maravillosa del año!)
A la inversa, un calendario vacacional vacío también puede pasar factura a la salud mental: la la soledad navideña es una epidemia en sí misma. Aunque el trastorno afectivo estacional, las redes sociales y otros factores pueden contribuir a la depresión navideña, sea cual sea el motivo, es importante encontrar algo que te aporte alegría.
Tómate un tiempo, cuando empiece la temporada, para identificar incluso las pequeñas cosas que te gustan de la estación, de modo que puedas priorizarlas en tu calendario. Podría estar haciendo
cacao casero
desde cero
hornear galletas navideñas
Si le apetece, puede dar un paseo por la nieve, llevar a sus hijos a patinar sobre hielo, ver el ballet del Cascanueces, organizar un Día de Acción de Amigos… ¡lo que quiera! Y hazlo factible: pon una fecha en tu calendario para hacer estas cosas.
No reserve en exceso (y siéntase cómodo diciendo que no)
Este ha sido un tema muy popular últimamente, pero la palabra “no” puede ser un acto radical de autocuidado. Esforzarse al máximo es una forma segura de erradicar la alegría de las fiestas; añade un estrés innecesario, que inevitablemente repercute en su salud para peor.
Proteja su salud mental: tiene un límite a lo que dice que sí. Considere cuáles son sus prioridades y qué puede omitir. Tampoco tienes que tener un conflicto de horarios. Si te resta energía y humor, te pone demasiado en el plato o te deja el más mínimo atisbo de ansiedad, hazte un favor… decir no. Esta es una excelente práctica para establecer los límites para el próximo año, también.
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Cree su santuario/escape
Independientemente de los planes o de los escenarios,
tener un plan
para un “escape” mental y físico es importante. Si te alojas en casa de familiares o amigos, encuentra tu lugar de escape, un sitio donde puedas recalibrarte cuando te sientas abrumado. Puede ser salir a dar un paseo, esconderse un rato en la habitación (incluso en el coche) para tomar el ritmo, o incluso pasar unos minutos en el baño para respirar profundamente. Aunque esto pueda sonar un poco dramático, es mejor tenerlo preparado de antemano por si los niveles de estrés aumentan; al menos tendrás tu respiro preplanificado.
Haz lo mismo si tienes gente de visita en tu casa, ya que puede resultar abrumador que tu respiro (tu casa) se vea invadido, incluso por aquellos a los que has invitado a entrar. Establece un lugar designado para el chill-out en tu casa donde puedas hacer un reset mental. Crea una “guarida zen” con cojines de meditación, aromaterapia, auriculares y mantas cómodas,
antifaces
– cualquier herramienta o
productos
que te ayuden a sentirte tranquilo y enraizado.
Aunque puede resultar incómodo poner límites, es Siempre es importante “tener una salida”, sobre todo si ver a determinados familiares o amigos suele ser más estresante (¡eh, suele pasar!). Darse el permiso de tomarse un descanso -o de marcharse, en algunos casos- es esencial. Recuerda: no eres la única persona que se ocupa de
drama familiar
(se trata de una experiencia de gran alcance, casi universal).
Proteja su autocuidado (y su rutina)
Mantener una rutina saludable y prácticas de autocuidado puede ayudarte a mantener una buena salud mental que te ayudará a evitar el pánico y el estrés de las fiestas más fácilmente. Esto incluye su práctica regular de movimiento y ejercicio, la meditación, el diario y cualquier otra cosa que haga regularmente para el mantenimiento de la salud mental.
Es fácil que estas cosas se queden en el camino cuando tu horario y tu rutina se ven alterados por los planes de vacaciones y los viajes. Anticípese: piense cómo va a incorporar estos componentes de su autocuidado esencial a su agenda de vacaciones, tanto si está ocupado en casa como si está de viaje.
He aquí algunas prácticas a tener en cuenta:
- Pruebe una sesión de
sesión de yoga nidra
para
reequilibrar el sistema nervioso
- Deje el teléfono en casa y dé un paseo por la naturaleza.
- Coge un jersey y una manta y tómate el café de la mañana al aire libre (para tomar vitamina D).
- Dedica algo de tiempo a escribir un diario: puede ser para hacer un brain dump, una lista de agradecimientos o para planificar y escribir tus futuros objetivos para 2024.
Proteja estas prácticas con firmeza: es esencial para mantener su salud mental en las mejores condiciones posibles. No dejes que el cuidado de tú mismo pasa a un segundo plano.
Practicar el autocuidado financiero
La presión financiera es una de las principales causas de estrés en las fiestassegún numerosos estudios y encuestas. El presión para gastar dinero en los regalos, la decoración, las fiestas y el atuendo, los preparativos de los viajes y, por supuesto, el aumento de la factura de la electricidad pueden hacer sudar a cualquiera. El estrés financiero puede estropear la temporada más festiva.
Una forma de proteger su salud mental en este sentido es practicar el autocuidado financiero. Aunque puede que no sea tan divertido como una mascarilla o una clase de yoga, es un paso necesario para evitar una tensión en tu bienestar emocional. Considere la posibilidad de hacer un inventario de sus finanzas, planificar los próximos gastos y recalibrar las expectativas de los gastos estacionales. Vuelve al segundo paso (¡decir no!) para evitar los gastos que no añaden alegría (es decir, valor) a tu vida esta temporada.
Sesiones de terapia previa al libro
Adelántese a los acontecimientos y consiga la agenda de su terapeuta (¡o la de un nuevo terapeuta!) para poder elaborar estrategias de salud mental específicas para su propio estado y circunstancias. Contar con un profesional de la salud mental de confianza, ya sea un consejero, un terapeuta licenciado, un psicólogo o un psiquiatra, puede reforzar su fuerza mental y emocional en un momento que, aunque sea precioso, puede ser bastante arduo.
Si esto no es una opción para ti, asegúrate de tener en cuenta otros medios de apoyo. Puede ser llamando a un ser querido o buscando una comunidad en la que se sienta seguro, querido y apoyado (ya sea apuntándose a un estudio de yoga o trabajando como voluntario en una organización local).
Practicar la gratitud
En épocas de mucho estrés y problemas de salud mental, puede ser difícil encontrar la gratitud. No obstante, inténtelo, aunque tenga que “fingir hasta que lo consiga”.
Aunque la práctica de la gratitud no puede erradicar todos los problemas, ya sean navideños o de otro tipo, sí que puede aumentar tu fortaleza mental y emocional y darte un motivo para sonreír a pesar de todo. Es un
mecanismo de supervivencia respaldado por la ciencia
que ha demostrado
que ha demostrado mejorar su salud
¡! Además, es 100% gratis, y con tantos luchando con su salud mental, es un buen momento para
dar las gracias
.
Lleva un diario de agradecimientos o La lista de agradecimiento de la mañana y de la tarde junto a tu cama es una forma fácil de empezar y terminar el día con un corazón agradecido. Piensa en ello como un entrenamiento de fuerza para tu mente. La coherencia es la clave.
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Establece expectativas realistas
Es fácil dejarse llevar por las expectativas idealizadas de unas fiestas “perfectas”, pero esto puede añadir una presión innecesaria, e incluso llevar a la decepción. Ten en cuenta que cada grupo familiar y de amigos tiene sus defectos, y que no todo saldrá exactamente como está planeado. Permítete aceptar las imperfecciones, ya sea un pastel navideño quemado o un comentario inoportuno de un pariente. En lugar de reaccionar o dejar que arruinen tus vacaciones, intenta centrarte en lo que más te importa, como pasar tiempo de calidad con tus seres queridos o disfrutar de esos momentos de calma dentro del caos.
Limitar la exposición a los medios sociales
Con infinitas publicaciones de fiestas, regalos y momentos “perfectos”, las redes sociales pueden ser abrumadoras durante las fiestas, o en cualquier época del año. A menudo provocan comparaciones o sentimientos de inadecuación, por lo que eliminar este desencadenante puede ser una de las cosas más fáciles de hacer por tu salud mental. Como mínimo, intenta limitar el tiempo que pasas frente a la pantalla estableciendo límites en las redes sociales, como programar momentos específicos del día para consultarlas. Mejor aún, plantéate una “desintoxicación vacacional” de las plataformas sociales, como forma de mantenerte conectado a la vida real y participar más en el momento presente.
Priorizar el sueño
El caos de las fiestas suele alterar nuestros hábitos de sueño, y dormir mal puede afectar significativamente a la salud mental. To maintain your energy and emotional balance, make getting quality sleep a non-negotiable, even if it means saying no to holiday plans. Practice a calming nighttime routine as often as possible, including mindful activities such as reading, deep breathing, or stretching. And while indulging can be part of the holiday fun, try to avoid caffeine and alcohol close to bedtime. Though seemingly simple, dar prioridad al sueño puede ayudarte mucho a controlar el estrés navideño y a mantener una mentalidad más feliz y saludable durante toda la temporada.
Gestiona tu salud mental para unas fiestas felices y saludables
Aunque las fiestas pueden ser un momento de alegría lleno de amor y gratitud, no todo el mundo comparte esta experiencia. Para muchos, las vacaciones pueden ser un reto. Así que si te falta la alegría de las fiestas y te sientes triste, estresado o ansioso, debes saber que es perfectamente normal: no estás solo. Sin embargo, si se prioriza y se protege la salud mental, es mucho más fácil sobrevivir (¿incluso prosperar?) a las fiestas. Cuando necesites apoyo, vuelve a estos consejos. Aunque sean sencillas, pueden tener un efecto profundo en ti, en tu salud y en tu felicidad.