Nutrición

10 alimentos que empeoran los sofocos

Además, ¡consejos sobre cómo modificar tu dieta para controlar tus síntomas!

By: Lexy Parsons

Los sofocos son uno de los síntomas distintivos -y más molestos- de la menopausia, caracterizados por repentinas olas de calor, sudoración y rubor. Afectan hasta 80% de las mujeres durante su transición, estos repentinos sofocos pueden perturbar la vida cotidiana e influir negativamente en el estado de ánimo y el bienestar general. Aunque los cambios hormonales suelen ser los culpables, ciertos alimentos pueden actuar como desencadenanteshaciendo que los sofocos sean más frecuentes o intensos. Pero hay buenas noticias. Si identificas y evitas estos culpables dietéticos, podrás controlar mejor tus síntomas, recuperar el control sobre tu bienestar y sentirte más autorizada en tu cuerpo.

A continuación, conoce los principales alimentos que empeoran los sofocos. Además, consejos prácticos que te ayudarán a sentirte mejor y a controlar los síntomas durante la menopausia.

Los 10 alimentos que pueden empeorar los sofocos, respaldados por la investigación

#nº 1 Alimentos picantes

Los alimentos picantes son uno de los culpables más comunes cuando se trata de desencadenar sofocos. Ingredientes como los chiles contienen capsaicinaun compuesto que activa las terminaciones nerviosas y eleva la temperatura corporal. Esta reacción imita la sensación de un sofoco, haciendo que los síntomas sean más frecuentes e intensos. Para las mujeres que ya experimentan molestias menopáusicas, comer los alimentos picantes pueden agravar la situación casi de inmediato.

Si te gustan las comidas picantes, considera la posibilidad de condimentar tus comidas con hierbas suaves como la albahaca, el perejil o el tomillo para añadir sabor sin el picante.

#2 Cafeína

Si eres amante del café, por desgracia, para muchas mujeres, existen pruebas que vinculan el consumo de cafeína al aumento de los sofocos. La cafeína actúa como estimulante, aumentando la frecuencia cardiaca y desencadenando la liberación de adrenalina, que puede hacer que se dispare tu temperatura corporal. Más allá de su impacto sobre la temperatura corporal, la cafeína también puede interferir en el sueño – un componente vital para controlar los síntomas de la menopausia.

Aunque no tengas que suprimirlo por completo los estudios han demostrado que las mujeres que reducen el consumo de cafeína experimentan menos sofocos y menos graves. Considera la posibilidad de cambiar tu café matutino por opciones descafeinadas o infusiones de hierbas como el rooibos, la manzanilla o la menta, que pueden favorecer la relajación y minimizar los desencadenantes de los sofocos.

#3 Alcohol

Aunque relajarse con un cóctel o una copa de vino pueda parecer relajante, el alcohol puede dilatar los vasos sanguíneos, aumentando el flujo sanguíneo a la piel y desencadenando la sensación de sofoco asociada a los sofocos. De hecho, las investigaciones destacan una fuerte relación entre el consumo de alcohol y la gravedad de los síntomas menopáusicos, especialmente síntomas vasomotores. Si buscas formas de reducir los desencadenantes, reducir o eliminar el alcohol puede suponer una diferencia notable.

Si te decepcionan estas noticias, ¡considera la posibilidad de tomar un cóctel alternativo! Si se preparan con cuidado, estas bebidas alternativas pueden ofrecer beneficios calmantes similares sin los efectos adversos.

#4 Alimentos azucarados

Las dietas ricas en azúcar no sólo contribuyen a las enfermedades crónicassino que pueden causar estragos en tus niveles de azúcar en sangre, provocando picos y caídas que alteran el equilibrio hormonal. Estas fluctuaciones pueden contribuyen a los sofocos estresando la capacidad de tu cuerpo para regular la temperatura. Sin embargo, los tentempiés azucarados como los dulces, los refrescos y los productos de bollería son especialmente problemáticos, según los CDCcomo media, las mujeres adultas consumen 15 cucharaditas de azúcares añadidos al día. Esto es más del doble de la cantidad recomendada al día.

Si eres goloso, ¡no tienes por qué privarte! En lugar de eso, simplemente opta por algo nutritivo, como frutas como bayas o manzanas, o dátiles con mantequilla de frutos secos, que aportan azúcares naturales junto con fibra y nutrientes.

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#5 Alimentos ricos en sodio

Los alimentos procesados y envasados, como las patatas fritas, las sopas enlatadas y la comida rápida, suelen estar cargados de sal en exceso, que constituye más del 60% de la dieta media estadounidense. Al alterar la capacidad natural del organismo para regular la temperatura, consumir una dieta rica en sodio puede empeorar los sofocosdejándote deshidratada, acalorada e incómoda.

Para combatirlo, evita los productos envasados y céntrate en alimentos frescos e integrales. En lugar de sal, utiliza hierbas y especias naturales como ajo, limón, jengibre y orégano para sazonar tus comidas.

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#6 Alimentos fritos y grasas refinadas

Del mismo modo, los alimentos ricos en grasas poco saludablescomo los aceites de semillas, las patatas fritas y las carnes procesadas, pueden desencadenar inflamación y desequilibrios hormonales. Las grasas refinadas, como las de los aceites de semillas, son especialmente problemáticas porque suelen estar cargadas de ácidos grasos omega-6que pueden promover la inflamación cuando se consumen en exceso. Esta inflamación no sólo altera la regulación hormonal, sino que también afecta a la capacidad del cuerpo para mantener una temperatura estable, agravando los sofocos.

En lugar de alimentos fritos y grasas refinadas, opta por grasas más saludables como los que se encuentran en los aguacates, los frutos secos, las semillas y el aceite de oliva. Hornear, asar a la parrilla o freír al aire los alimentos también puede proporcionar una alternativa deliciosa y satisfactoria sin los efectos inflamatorios.

#7 Carnes rojas y grasas

Las carnes rojas y grasas, como la ternera, el cordero y el cerdo pueden contribuir a empeorar los sofocos debido a su alto contenido en grasas saturadas. Las dietas ricas en grasas saturadas se han relacionado con inflamación y los desequilibrios hormonales, factores ambos que agravan los síntomas de la menopausia.

En su lugar, considera la posibilidad de sustituir las carnes rojas y grasas por fuentes de proteínas magras como el pollo, el pavo, el pescado u opciones vegetales como las lentejas, el tofu y los garbanzos: ¡puedes seguir preparando deliciosos platos repletos de proteínas sin empeorar los síntomas!

#8 Productos lácteos

Para algunas mujeres, los productos lácteos como la leche, el queso y el yogur pueden empeorar los sofocos. Los lácteos tienen el potencial de alteran la regulación hormonal y provocan una leve inflamación en las personas sensibles o intolerantes a la lactosa. Estas reacciones pueden intensificar los síntomas menopáusicos, incluidos los sofocos y los sudores nocturnos. Si notas una conexión entre los lácteos y tus síntomas, considera la posibilidad de cambiar a alternativas vegetales como la leche de almendras, la leche de avena o el yogur de coco. Estas opciones no sólo son más fáciles de digerir, sino que también ofrecen nutrientes que favorecen la salud ósea y el bienestar general durante la menopausia.

#9 Chocolate

Aunque el chocolate puede ser una golosina reconfortante, desgraciadamente puede desencadenar sofocos a algunas mujeres. El chocolate contiene cafeína y teobrominaambos son estimulantes que pueden elevar tu ritmo cardiaco y tu temperatura corporal, intensificando potencialmente los sofocos. El chocolate negro, aunque es rico en antioxidantes, tiene un mayor contenido de cafeína que el chocolate con leche, lo que puede convertirlo en un desencadenante más fuerte. Además, el contenido de azúcar de muchas chocolatinas y golosinas puede provocar subidas y bajadas de azúcar en sangre, lo que afecta aún más a la estabilidad hormonal.

Si el chocolate empeora tus síntomas, considera alternativas como la algarroba, un sustituto natural sin cafeína que ofrece un sabor similar sin los efectos desencadenantes. Para los caprichos ocasionales, opta por el chocolate bajo en azúcar y sin lácteos para minimizar los posibles desencadenantes de los sofocos. Y no te olvides de considerar otras opciones de postres sin chocolate: desde dátiles rellenos de mantequilla de frutos secos hasta cuencos de yogur de coco, ¡hay muchas delicias nutritivas y deliciosas a tener en cuenta!

#10 Edulcorantes artificiales

Aunque se comercializan como una alternativa más sana al azúcar, los edulcorantes artificiales como el aspartamo y la sucralosa pueden alterar la salud intestinal y el equilibrio hormonal. Estos desequilibrios pueden provocar sofocos más graves en algunas mujeres. En investigación también sugieren que los edulcorantes artificiales podrían interferir en el metabolismo de los estrógenos.

Los edulcorantes naturales como la miel cruda, los dátiles Medjool o la fruta fresca son mejores alternativas para quienes desean reducir su consumo de azúcar refinado. Ten en cuenta que la moderación sigue siendo importante al consumir edulcorantes naturales.

Consejos prácticos para controlar los sofocos

Aunque controlar los sofocos puede parecer abrumador, unos pequeños ajustes dietéticos pueden marcar la diferencia. Más allá de los alimentos específicos, es importante mantenerse hidratada, ya que beber mucha agua a lo largo del día ayuda a regular la temperatura corporal y a minimizar la intensidad de los sofocos. Para identificar y evitar los desencadenantes personales, considera la posibilidad de llevar un diario alimentario para registrar las comidas y anotar cualquier pauta que empeore los síntomas. Además, centrarte en un Una dieta densa en nutrientes, rica en cereales integrales, proteínas magras y productos frescos, puede favorecer el equilibrio hormonal general y reducir la inflamación.

Si evitas estos desencadenantes dietéticos y adoptas un enfoque más equilibrado en tus comidas, puedes reducir significativamente la frecuencia e intensidad de los sofocos, ayudándote a sentirte más controlada y tranquila durante tu viaje menopáusico.