Quieres hacer ejercicio, pero tu agenda está muy ocupada y no sabes por dónde empezar. Y cada vez que te animas a moverte, parece que hay algo que se interpone en tu camino para convertirlo en una parte habitual de tu rutina frente a una ocurrencia única. Si esto le suena a usted y se pregunta cómo convertir el ejercicio en un hábito, estamos aquí para ayudarle con nueve consejos fáciles de poner en práctica.
La ciencia de la creación de hábitos
Según
investigación
Los hábitos a largo plazo son los que realizas semanalmente, de forma rutinaria, aplicándolos en momentos constantes a lo largo del día. Aunque es sabido que se necesitan 21 días para crear o eliminar un hábito, ciencia sugiere que puede ser de 18 a 254 días. Como la mayoría de las cosas, no es tan blanco o negro. Depende de sus objetivos, su sistema de apoyo, sus hábitos de vida, su motivación y su salud general, entre otros factores. La clave para conseguir que un hábito se mantenga es repetir continuamente el hábito o comportamiento deseado. Cuanto más se repita el comportamiento, más probable será que se convierta en un hábito.
A continuación, compartimos nuestros principales consejos para convertir el ejercicio en un hábito (que se mantenga).
9 sencillos consejos para convertir el ejercicio en un hábito
#1. Colocar la ropa
Una de las mejores maneras de convertir el ejercicio en un hábito es planificar con antelación y eliminar cualquier factor que se interponga entre usted y su entrenamiento. Si preparas tu ropa de entrenamiento la noche anterior, te resultará más fácil ponerte tu ropa y salir al gimnasio, antes de que tengas tiempo de poner excusas o distraerte. Si haces de esto una parte consciente de tu rutina matutina, pronto se convertirá en un hábito.
No es una persona madrugadora? Planifica con antelación metiendo tu ropa de entrenamiento en tu bolsa de trabajo para estar listo para moverte cuando surja la oportunidad en tu día.
#2 Planifica tu entrenamiento
Elabore un programa de entrenamiento aproximado para la semana, de modo que tenga un plan establecido. Tal vez haga un entrenamiento de tonificación de brazos el lunes, un
sesión de HIIT de FitOn
el miércoles, caminar a paso ligero el jueves y terminar la semana con
yoga
o
Pilates
. Tener un plan te ayudará a mantenerte motivado y comprometido con tus objetivos y tu rutina de entrenamiento. Repetir esto al principio (o al final) de cada semana es una buena manera de convertir el ejercicio en un hábito.
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#3 Lápiz de colores
Ahora que tiene un horario establecido, ¡comprométase con su horario! Añádelo a tu calendario como si fuera una reunión, incluso puedes pensar que es una reunión contigo mismo. Y al igual que en cualquier otra reunión, si la desechas continuamente, tus objetivos serán mucho más difíciles de alcanzar. Así pues, programe un entrenamiento FitOn, bloquee su descanso para comer y preséntese preparado y listo para empezar.
#4 Encuentra un compañero de entrenamiento
Incluso las personas más motivadas pasan por períodos en los que se encuentran desmotivadas. Somos humanos, ¡seguro que pasa! ¿Una forma de evitar esta rutina de ejercicios? Consigue un compañero de entrenamiento. Puede ser fácil saltarse el entrenamiento o poner excusas si sólo confías en la automotivación para rendir cuentas. Pero, según investigaciónSi tienes a alguien al otro lado que depende de ti, es más probable que te comprometas con una rutina y la cumplas. Además, hacer ejercicio con un compañero es más divertido. ¿Un poco de competencia amistosa, alguien?
¿Quieres invitar a tus amigos y familiares a participar en la diversión? Invitar a los amigos a FitOn es fácil. Al ir a la pestaña de amigos en la aplicación, puedes seleccionar amigos de tus contactos y
envíales una invitación
.
#5 Lleva tus llamadas de trabajo sobre la marcha
¿Has oído hablar de las reuniones a pie? Si el trabajo lo permite, planifique sus llamadas y reuniones sobre la marcha. Tanto si se trata de una llamada virtual como de una comida en persona, salir a la calle y caminar mientras se habla es una forma estupenda de moverse (a la vez que se gestiona eficazmente el tiempo y la apretada agenda). Además, se ha demostrado que el ejercicio aumentar ¡productividad e impulsar la creatividad! Un beneficio para todos.
#6 Encuentra un entrenamiento que te haga sentir bien
Puede que los entrenamientos HIIT estén de moda y que tu mejor amiga consiga los brazos tonificados y esbeltos que siempre has deseado en su clase de Pilates con Megaformer, pero eso no significa que sean los mejores entrenamientos para ti. Si los amas, ¡increíble! Pero lo importante es encontrar un entrenamiento que te haga sentir bien y que sea el mejor para TU cuerpo. Mantener una rutina de ejercicios consiste en encontrar un entrenamiento que te haga sentir bien tanto por dentro como por fuera.
¿Necesita ayuda para empezar? Dale al play en la aplicación FitOn y dirígete a nuestro biblioteca de ejercicios. Con todo, desde Pilates hasta HIIT, pasando por el entrenamiento de fuerza y el yoga, seguro que encuentras algo que se adapte a ti y a tus necesidades.
#7 Establecer objetivos pequeños y alcanzables
Piensa en lo bien que te sientes cuando tachas tu lista de tareas o superas tus objetivos. Es bastante motivador, ¿verdad? Pues bien, esa es la base de este truco para convertir el ejercicio en un hábito. Como se dice, la lentitud y la constancia ganan la carrera. En lugar de fijarse objetivos poco realistas y desanimarse por no alcanzarlos, prepárese para el éxito empezando por algo pequeño. Diga adiós a la mentalidad de “ir a lo grande o irse a casa”, e invite a una mentalidad más saludable con pequeños pasos procesables.
En lugar de hacer tu entrenamiento objetivo siete días a la semana, empieza con un objetivo de tres días, ¡quizás cuatro! Además, estos entrenamientos no tienen por qué ser sesiones de gimnasio de una hora de duración o clases de fitness en tiendas. Puedes obtener todos los beneficios con un entrenamiento de 15 minutos en tu cocina. Si todavía te sientes motivado para avanzar en esos otros cuatro días, ¿significa eso que no puedes? ¡Claro que no! Pero, ¡piensa en ello como una bonificación! Has alcanzado todos tus objetivos de ejercicio, ¡y aún más! A veces, estos trucos mentales nos ayudan a crear un hábito al reforzar un comportamiento positivo y una mentalidad positiva. Además, con estos pequeños objetivos, estarás sentando una base sólida y sostenible para esos objetivos más grandes a largo plazo que quieres clavar.
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#8 Comprométase a dedicar sólo 5 minutos
Hablando de pequeñas metas, comprométete a hacer un entrenamiento diario de 5 a 10 minutos. Incluso en los días más ajetreados, todos podemos dedicar cinco minutos a movernos. Tal vez hagas un ejercicio de abdominales de 5 minutos, completes 50 burpees con 5 rachas de 10 burpees repartidas a lo largo del día, o te pongas las zapatillas de deporte para dar un paseo de un kilómetro o hacer footing con tu cachorro. Después de un tiempo, aplastarás estos 5 o 10 minutos sin siquiera pensarlo – ¡incluso puedes notar que acumulas minutos!
#9 Planifique los días de recuperación en su horario
Estás trabajando duro tu cuerpo en el gimnasio, estás comiendo los alimentos adecuados, e incluso estás haciendo un esfuerzo consciente para reducir el estrés en tu vida. ¡Pero parte de ver los resultados por los que estás trabajando tan duro incluye priorizar también los días de recuperación! Sin descanso, su cuerpo no tendrá el tiempo adecuado para recuperarse, y en realidad podría estancarse y obstaculizar sus resultados. Además, corres el riesgo de agotamiento. Así que, al igual que esperas con ansias tus entrenamientos, ¡empieza a esperar también tus días de recuperación!
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Lo que hay que llevar
Piensa de forma diferente y encuentra formas creativas de moverte. Recuerda: el movimiento no se limita a los entrenamientos planificados o a los ejercicios de fitness. Piense en: subir las escaleras en lugar del ascensor, ir a pie a por un café en lugar de en coche, ir de excursión o en bicicleta, e incluso llevar al perro a dar un paseo más largo de lo habitual. ¡Todo movimiento es beneficioso! Y cuanto más te muevas, mejor te sentirás. Cuanto mejor te sientas, más motivado estarás para seguir moviéndote. ¿Ves el ciclo que se está produciendo aquí? Así es como se forman los hábitos saludables.