Una de las cosas más positivas de los últimos años es que la salud mental está en el primer plano de la conversación cultural. Todos nosotros, independientemente de nuestra procedencia o circunstancias, nos enfrentamos a nuestra salud mental, sobre todo en el encierro y en el momento álgido de la pandemia.
Pero tenemos altibajos, luchas y triunfos, independientemente del estado del mundo. Ya es relativamente conocido que
más del 30 por ciento
(!!) de los estadounidenses sufrirán algún tipo de trastorno de ansiedad en algún momento de su vida.
Uno de cada cinco adultos estadounidenses
experimentan una enfermedad mental cada año – y no es necesario tener una enfermedad mental diagnosticada para pasar por una lucha de salud mental. Según los CDC, más de El 50 por ciento de nosotros experimentará una enfermedad o trastorno de salud mental a lo largo de su vida. Ya sea una temporada de intenso estrés o una enfermedad grave, nos afecta a casi todos.
Dado que nuestros cuerpos y mentes están entrelazados, nuestra salud física se ve afectada por nuestra salud mental (¡y viceversa!). Para vivir una vida más sana y feliz, es imprescindible que controlemos nuestro cerebro y nuestro bienestar emocional.
Señales de que necesita dar prioridad a su salud mental
Tu cuerpo tiene una forma de darte algunas “luces de control del motor”, por así decirlo, formas de hacerte saber que las cosas no están funcionando como deberían normalmente, y que necesitas pivotar.
El psicólogo clínico Forrest Talley, Ph.D., fundador de
Servicios Psicológicos Invictus
explica que esto es similar al funcionamiento de la NASA. “Cualquiera que haya escuchado alguna vez la charla por radio de la NASA que se produce cuando una nave espacial está a punto de despegar ha oído el constante ir y venir entre la torre de control y los pilotos”, dice el Dr. Talley. “Verifican que varios sistemas están en línea, o que están operativos” y listos para funcionar”.
“Sería una tontería que dieran por sentado que, sólo porque se hayan producido numerosos lanzamientos con éxito en el pasado, todo va a funcionar como debería esta vez también”, continúa el Dr. Talley. “Al comprobar dos veces el estado de los sistemas esenciales, no sólo contribuyen a garantizar el éxito de la misión, sino que también reducen el riesgo de sufrir un fallo catastrófico”.
¿Qué significa esto para la salud mental? “Hay una lección en este enfoque que debería ser adoptada por cada uno de nosotros”, dice. “En concreto, es importante “comprobar” periódicamente cómo funcionan nuestros “sistemas esenciales”. Uno de estos sistemas es tu salud mental”.
6 formas de controlar su salud mental
“La salud mental se ve más afectada por las relaciones, los estados de ánimo, los pensamientos, los comportamientos, la salud física y, para muchos, las prácticas religiosas”, explica el Dr. Talley. A continuación, sus principales sugerencias para su lista de control de salud mental. ¿La mejor parte? La lista completa puede completarse en unos 10 minutos (o menos), y sólo es necesario hacerla una vez cada varias semanas o una vez al mes.
“Para sacar el máximo partido a esta lista de comprobación, lleva un diario de tus descubrimientos y luego pon en marcha planes”, sugiere. “Si hay varias áreas en las que necesitas trabajar, priorízalas y trabaja sólo en la máxima prioridad. Una vez que hayas progresado en un área, sigue con las demás”.
#1 Revisa tus relaciones
Las preguntas del Dr. Talley para sus relaciones de amistad, familiares, laborales y románticas: “¿Mis relaciones más cercanas avanzan de la manera que me gustaría? ¿Han surgido fricciones en una o más de ellas y, si es así, tengo que esforzarme por resolver el origen de esas fricciones? ¿He prestado suficiente atención a las personas con las que estoy más cerca?”. Tome notas mentales de esto, y evalúe cómo estas métricas de relación están impactando en su estado actual.
#2 Califica tu estado de ánimo
Pregúntese lo siguiente, dice el Dr. Talley: “¿Cómo calificaría mi estado de ánimo medio a lo largo de la última semana (o dos semanas)? Si es mejor que el habitual, ¿cuál es la razón y puedo aprovecharlo en el futuro (mantener el buen humor)? Si mi estado de ánimo ha bajado, ¿hay alguna razón que pueda señalar, y si es así, qué puedo hacer al respecto?” Si sientes que tu estado de ánimo no ha sido bueno durante un tiempo, entonces el estrés, la ansiedad o incluso la depresión podrían ser los culpables. ¡Toma nota!
#3 Visita tus pensamientos
¿En qué ha consistido su diálogo mental últimamente? “[Ask yourself,] ¿Son mis pensamientos principalmente positivos, que me hacen avanzar en la vida, centrados en la gratitud y las oportunidades, o son negativos, que me frenan y están llenos de arrepentimiento, envidia e ira?” Si son negativos, es hora de hacer un esfuerzo importante para volver a centrarse en lo positivo”, dice el Dr. Talley.
#4 Haz un inventario de tus hábitos y comportamientos
“¿Están tus comportamientos en consonancia con tus prioridades, valores y objetivos futuros?”, pregunta el Dr. Talley. Nos da un ejemplo con el que podemos identificarnos: queremos estar delgados y en forma, tal vez competir en un triatlón, o incluso alcanzar un gran objetivo de pérdida de peso. “Pero, llegas a casa por la noche, abres una cerveza, comes una pizza y ves reposiciones de Amigos [we’ve been there!].” En este caso, dice, tus comportamientos no están alineados con tus objetivos, y esto puede ser indicativo de un problema de salud mental. “Es el momento de cambiar tus objetivos, o de cambiar tus comportamientos”, dice. “No hay excusas, ponte a trabajar”. Esto también es cierto si suele seguir una rutina, y últimamente ha estado “apagado”. Considere esto como una luz de control del motor.
#5 Revise su salud física
“¿Su salud es estupenda? ¿No es normal, ni aceptable, sino estupenda?”, pregunta el Dr. Talley. “La mala salud disminuye la agudeza mental y puede llevar a la depresión”, dice. Estas cosas van de la mano: una mala salud física puede llevar a una mala salud mental, y una mala salud mental puede llevar a una mala salud física (un verdadero enigma del huevo o la gallina). “¿Ha estado descuidando algunos problemas médicos persistentes porque ‘simplemente no hay tiempo’?”, pregunta. “No lo dejes para más tarde; consulta con tu médico y soluciona las cosas”. Algunas métricas para comprobar: la digestión, los niveles de energía, la piel, los dolores de cabeza, el sueño, el rechinar de dientes/apretar la mandíbula, los dolores y las molestias.
#6 Conecta con tu lado espiritual
El Dr. Talley explica que
fe y espiritualidad
juegan un papel importante en el bienestar mental y emocional. ¿Cuál es su práctica espiritual? “¿Tienes fuertes creencias basadas en la fe, pero has dejado de lado cualquier intento de ponerlas en práctica?”, pregunta el Dr. Talley. “Esto acabará desgastando tu salud mental. Si se trata de la asistencia a la iglesia/templo, empiece. ¿Sus creencias religiosas implican ayudar a los menos afortunados? Haz un plan y ejecútalo. No lo pospongas, sólo aborda un pequeño paso. Eso llevará al impulso para hacer más”.
Sea proactivo: Haga de la buena salud mental un estilo de vida
Como dijo el Dr. Talley, hay que ir paso a paso. Y no esperes a sentirte mal: la mejor manera de cuidar tu mente es ser proactivo con tu salud mental configurando tu estilo de vida en torno a tus objetivos de bienestar.
Dar prioridad al sueño, a la nutrición, al ejercicio, a la terapia, a la práctica espiritual personal, al tiempo con los seres queridos y a las revisiones médicas periódicas no sólo favorece su salud general, sino que garantiza que su mente tenga la mejor capacidad para gestionar las estaciones más duras de la vida. Si sigues este consejo, dice el Dr. Talley, “en poco tiempo, tu estado mental experimentará un cambio notable”.